La compresión de nuestra
existencia siempre nos ha llevado a un sentimiento de soledad y vacío. En
determinados momentos en la vida aquí en la materia, sentimos fuertemente una
nostalgia que nada tiene que ver con los acontecimientos materiales
¿Que es esa nostalgia, y de donde
viene?
Existe un sentimiento que subyace
en nosotros, que se reconoce como "echar de menos", "echar en
falta" algo o alguien que no se sabe muy bien que es, pero que si sentimos
claramente que es algo muy nuestro, que nos pertenece muy profundamente. A
veces, esta nostalgia toma la forma de sentimiento de echar de menos un lugar,
al que identificamos como nuestra verdadera casa, un sitio del que nos sentimos
parte de el y en paz y a la vez, nos sentimos en unidad con el. Otras veces,
podemos echar de menos a alguien, no sabemos muy bien quién es. Pero si
sentimos claramente que es alguien muy afín a nosotros. Puede ser un ser, o
pueden ser varios seres, o todo un grupo de seres, a los que identificamos como
"nuestra verdadera familia", en nuestro interior.
No tiene nada que ver con las
experiencias materiales, no buscamos un sitio físico, ni buscamos a alguien
especifico, es algo más que eso, aunque a veces pueda derivar en una búsqueda
material o personal cuando no se ha entendido o identificado bien. Pues bien,
esa nostalgia tiene una explicación muy clara: Todos nosotros estamos aquí en
un cuerpo físico tridimensional desterrados y alejados momentáneamente de
nuestra verdadera naturaleza que es Luz, y Amor. Todo esto se olvida al
ingresar a la tercera dimensión. Pero la intuición queda profundamente grabada.
Esa intuición, al pasar por el filtro de la personalidad, nos trae parte del
recuerdo, que nos falta. Algo como que nos falta alguien, y que no somos de
aquí, es decir de la tierra, o al menos del plano
tridimensional.
Empezamos a recordar que no podemos ser sólo esto que
vemos, sino que somos mucho más, incluso, de lo que intuimos. Hay momentos
en la vida, en los que nos sentimos especialmente sensibles al llamado de la
verdad que habita en nosotros, y cuando ese llamado llega, no entendemos. Nos
sentimos desgraciados y no sabemos exactamente por qué. Nos sentimos vacíos sin
saber que es lo que nos está faltando. La vida se convierte así en diferentes
maneras de tapar, de poner parches en ese vacío existencial que sentimos. A
veces, echamos en falta nuestra casa, nuestro verdadero hogar, es decir,
nuestro origen cósmico.
Y es que sentimos claramente que
no pertenecemos a este mundo, que se nos presenta como un conjunto de seres y
de acciones muy lejanas de nuestra verdadera naturaleza. Empezamos a
recordar que no podemos ser sólo esto que vemos, sino que somos mucho más,
incluso, de lo que intuimos. Somos ciudadanos del universo, estamos de
paso, viviendo una experiencia en la tierra, y todos somos infinitamente amados.
Preciosas palabras que nos dejas para pensar si la vida es la existencia y hay algo más allá del amor. Un abrazo
ResponderEliminarCiudadano del universo, de paso por la experiencia terrenal.
ResponderEliminarAbrazo fraternal.
hola cristina,excelente entrada que me recoerdo a una pelicula que vi no hace mucho,se llama "nuestro hogar" alli se refleja muy bien esto que nos explicas,si no la viste a la peli te la recomiendo amiga.
ResponderEliminarte dejo un fuerte abrazo!!!!!!
Qué bueno saber que somos amados y que nuestro paso por esta tierra dejará huella.
ResponderEliminarHermoso todo lo que nos has contado, sobre todo para entendernos un poco más, para saber el porqué de esos vacíos.
Un beso grande.
Los años nos van acercando esa certeza, por lo que el sendero tiene sonidos y colores agradables.
ResponderEliminarAcunas mi alma con cada palabra
Gracias
Cariños
Somos Universo, que nos llama de una forma que no podemos negar de dónde venimos y dónde acabaremos. Estamos de paso aprendiendo de la vida las lecciones encomendadas. Un abrazo lleno de armonía y paz.
ResponderEliminarCristina, desde siempre he sentido esa nostalgia que tú defines maravillosamente en tu entrada. Yo siempre desde que me recuerdo le decía a mi padre que mi casa estaba allá arriba en las estrellas... y al verlas tan altas, lloraba porque no sabía como ir a ellas, entonces él me subía en sus hombros y me decía...¿ves como ahora ya estás más arriba? pues como eres muy buena, un día te crecerán alas y podrás ir hacia ellas... y hablábamos, hablábamos hasta que él me convencía.
ResponderEliminarHoy los años han pasado, soy una mujer adulta y continúo teniendo esa nostalgia que a veces resulta hasta dolorosa. Por eso te digo que eres una persona muy valiente al hablar así... alguien muy sabio dijo hace más de 2.000 años...¡El que tenga ojos para ver, que vea y el que tenga oidos para oir que oiga...!
Yo continuo sintiendo que mi verdadero hogar, está en un lugar allá arriba, en un lugar entre las estrellas.
Besos de luz mi amiga mensajera del alba.
Nines
Es un alivio saber que somos amados, y pensar que esos vacíos que a veces sentimos tu nos los has explicado muy bien. Muchas gracias por tu entrada tan interesante. Un abrazo
ResponderEliminarHola Cristina, tu espiritualidad y tus ganas de llevar un paso más allá la búsqueda del conocimiento es lo que hacen de tu espacio universal un elemento de comprensión y de fuerza cósmica como llamas a la familia en tu entrada. Ayer veía un reportaje sobre la grandeza del universo y sobre la inmensidad de cuerpos celestes que existen. Nuestro hogar común, La Tierra merecería una cordialidad y afecto como el que tratas en este texto. Un gran y fraternal abrazo.
ResponderEliminarTodo tiene sentido con tu forma de explicar, gracias.
ResponderEliminarBesos 🌹 🌸
Muy cierto, me encanto esta reflexión. Te mando un beso
ResponderEliminarEs bueno saber que estamos en la tierra de paso, en aprendizaje, pero que regresaremos a donde pertenecemos y seremos bien acogidos.
ResponderEliminarUn beso
Cristina, tus palabras nos llegan como la luz del alba, que nos abre la vida y nos recuerda que todo empieza cada día...Nos llenan de paz y de esperanza...
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo grande por tu bello mensaje, amiga.
Una entrada maravillosa con un claro mensaje de reflexión. Hay que pensar en qué momentos sentimos esa nostalgia y por qué, será porque en esos momentos estamos en conexión total con el universo? Seguro que sí. Un abrazo y gracias Cristina una vez más por ir enseñándonos el camino.
ResponderEliminarCierto que no somos, solamente, esto que vemos. Y cierto que hay como un ansia de regresar a la casa del «Padre», como se dice en términos de espiritualidad... Pero no sería menos cierto que nuestra presencia aquí, con todas las limitaciones que se quiera, tiene su razón de ser. Sea ésta escuela de aprendizaje, tránsito a otra parte, o despertar del sueño de las apariencias, las ilusiones, los apegos, la impermanencia, etc.
ResponderEliminarAbrazos, Cristina.
Besos.
ResponderEliminarHermosas reflexiones. Yo echo de menos la juventud perdida, tengo el alma llena de proyectos pero siento que el tiempo se acaba.
ResponderEliminarBesos
Profundas reflexiones Cristina ...las nostalgias las percibo como vacíos del alma necesarios de llenar y solo la fe ayuda ese pasar .
ResponderEliminarFuerte abrazo
Comprenderlo disminuye el miedo, desvanece la incertidumbre.
ResponderEliminarSaber que somos amados nos serena y nos impulsa a soltarnos en un mar de confianza.
Muchos besitos de anís.
Una entrada para reflexionar, como todas las tuyas.
ResponderEliminarBesos
Que hermoso texto!
ResponderEliminarTambién creo que el alma Sabe, solo que no recuerda...por eso la Divina Nostalgia nos invade.
Un abrazo Cristina.
Nostalgia... ¡Menudo sentimiento! Hablar de nostalgia es utilizar palabras mayores.
ResponderEliminarSi la nostalgia te conduce a la rememoración de acontecimiento bellos del pasado ¡Bendita sea! Pero puede tener connotaciones negativas y presentarse como una melancolía que a veces es difícil de superar... Entonces, no me parece algo positivo.
Un besito Cristina
Yo siento muchas veces esa nostalgia que tan bellamente nos expresas, sobre todo cuando de noche miro al cielo. Pero sé que nuestra experiencia en la tierra es una oportunidad, un regalo...
ResponderEliminarUn abrazo Cristina
Júlia
Que maravilla de entrada y reflexión. La nostalgia, como raíces de nuestra memoria. Ayuda a reforzar el camino en la vida. Gracias por tu ayuda, tus palabras, tus consejos.
ResponderEliminarBeso
Somos infinitamente amados...
ResponderEliminarO que falta é o ser humano começar a diminuir as
diferenças e começarem a amar-se uns aos outros...
A nostalgia é necessária mas uma etapa de caminhada.
Bom começo de março.
PAZ E BEM.
hola querida cristina cielo esta mañana estaba leyendo tu entrada y de pronto se me fué la conexion asi que aqui estoy en la tarde lluviosa tu eres de las mias jajaja quiero decir que esa explicación que das es comprensible no para todo el mundo muchas personas creen que morimos y ya está y no se da cuenta que dejamos la energuia para viajar por el espacio infinito. esa aureola que muchas personas dejan asomar, energia pura, luz radiante, y cuando echamos de menos a alguien a algun lugar es que dejamos parte de esa luz de esa energuia allá donde un dia te despertaste con una felicidad enorme, no se si me he explicado bien pero es lo que pienso un muasckkkkkkkkkkkkkkkk muy grande preciosa una entrada muy valiosa que tengas un finde maravilloso
ResponderEliminarProfunda y fantástica reflexión.
ResponderEliminarTe doy las gracias porque me ha encantado.
Un fuerte abrazo. Feliz fin de semana.
Sentir que somos inmensamente amados es la experiencia más sublime que puede sentir el ser humano.Y aunque sabemos que tenemos fecha de caducidad,no desesperamos, porque estamos seguros de que nuestro PADRE-MADRE nos esta esperando con los brazos abiertos para llevarnos a nuestro verdadero y definitivo hogar,para ser felices por toda la eternidad.
ResponderEliminarCristina ,tus escritos transmiten luz y esperanza.En un mundo tan materializado, es necesario elevarnos y pensar en lo que realmente nos da paz y alegría de vivir.
Muchas gracias por todo lo que nos das.
Un abrazo
Una maravilla tu profunda reflexión, de hoy.
ResponderEliminarMe ha encantado, amiga.
Un abrazo.
Por todo ellos tenemos tanta responsabilidad , no?
ResponderEliminarde entregar parte de ese amor , el mejor cada día y ayudar a encaminarnos a esa luz que todos al fin tienen y se pueda al regresar estar mejores que como vinimos a prender ...del amor y de tanto mas...
Y llenar esos espacios con lo mejor que nos entrega este bello Planeta para realmente luego volver a alcanzar la estrella...
Ese sentirse amado, es parte de un Dios que no ayuda siempre en momentos tormentosos, cuando de repente no sabemos navegar por este mar, donde las aguas se multiplican para sollozar, o se abalanzan en tu andar, no sabemos reconocer aquello que no vemos, nos sentimos perdidos en un mundo lleno de fraude, y dolor, así vamos… junto a esa nostalgia que no sabemos definir, excelente, gracias Cristina.
ResponderEliminarAbrazo
Boa tarde, partilha perfeita da boa reflexão e profunda.
ResponderEliminarAG
Cristina que profundidad de letras, como siempre nos dejas pensando, muchas veces he sentido la nostalgia personalmente, por gente y lugares, y yo diría has de palabras... que bonita reflexión la tomaré en cuenta :* besos preciosa.
ResponderEliminarEchar de menos? Ahí, ahí..... no me gusta nada esa frase. Qué soledad!!!
ResponderEliminarUn abrazo.
hola cristina cielo llego a dejarte un saludito y de paso releer tu entrada que me gustó mucho muchisimoooooo besitosssss
ResponderEliminarHola paso hacerte una visita me encanta tu entrada parece de otra galaxia pero preciosa tus letras son profundas y tiernas. Saludos
ResponderEliminarProfundidad y reflexione...siempre aprendiendo.
ResponderEliminarGracias por tus bellas entradas.
Besos
¡Menos mal! Es un consuelo pensarlo cuando, como yo, se esta llegando al final del camino... Me encanta como escribes!!!
ResponderEliminarAbrazos
Muy bella música...aquí estoy con todos mis sentidos entregados a ella
ResponderEliminarGracias Cristina por tus hermosas palabras que gentilmente dejaste en mi sitio
Abrazo
Me ha encantado Cristina, y es totalmente cierto. Aquí estamos únicamente para vivir una experiencia temporal y evolucionar. Un fuerte abrazo y buen fin de semana. @Pepe_Lasala
ResponderEliminarCuando te leo, siempre me dejas pensando sobre lo que dices, hoy, por no variar, me pasará igual, pero tengo que destacar una frase, con la que acabas tu entrada, que me ha encantado.
ResponderEliminarMás o menos decía así Todos somos ciudadanos del Universo, estamos aquí de paso y estamos aprendiendo una nueva experiencia.
Mil gracias.
Cariños en el corazón.
Kasioles
Muy bueno. Si. Ademas eso tembien tiene que ver con la edad. A medida que vamos avanzando en años. Hemos vivido mas situaciones, momentos, etc mas espacio hay para la nostalgia. Un dia recordaremos una cosa, luego otra. Aunque siempre tambien hay que proyectar y mirar hacia adelante. Si no nos terminaremos ahogando en los recuerdos. Te mando un abrazo
ResponderEliminarTus entradas siempre me invitan a reflexionar Cristina.
ResponderEliminarFeliz fin de semana.
Abrazos.
Cristina
ResponderEliminarperdón por la simpleza de mi comentario. Me quedo con el rubio de la primera foto.