El Universo y todo lo que nos
rodea está compuesto de energía, de partículas elementales que componen los
átomos y que están en constante movimiento. A este movimiento u oscilación lo
llamaremos vibración. Aunque nos cueste creer, una mesa, el aire o nosotros
mismos somos energía vibrando. Cuanto más densa es la materia, más lenta es la
vibración de la energía y cuanto más sutil es la materia más rápida es la
vibración de la energía. Cuando decimos que todo es energía, es así literalmente; es decir, incluso los
pensamientos y las emociones son energía y dependiendo de la capacidad de éstos
tendrán un tipo de vibración u otro.
Los pensamientos y emociones negativas como la envidia, el odio o el miedo son energías de baja vibración y por el contrario, los pensamientos y emociones positivas como la alegría y el amor son energías de alta vibración; de hecho, el Amor es la energía que tiene la frecuencia de vibración más elevada que existe. El Universo y todo cuanto existe está formado por energía. En el fondo sólo existe una única energía a la que llamamos AMOR. Todas las demás son variaciones de dicha energía, incluso variaciones a su opuesto al que llamamos MIEDO, pero aún así, variaciones. Básicamente podemos definir dos tipos de energía:
Los pensamientos y emociones negativas como la envidia, el odio o el miedo son energías de baja vibración y por el contrario, los pensamientos y emociones positivas como la alegría y el amor son energías de alta vibración; de hecho, el Amor es la energía que tiene la frecuencia de vibración más elevada que existe. El Universo y todo cuanto existe está formado por energía. En el fondo sólo existe una única energía a la que llamamos AMOR. Todas las demás son variaciones de dicha energía, incluso variaciones a su opuesto al que llamamos MIEDO, pero aún así, variaciones. Básicamente podemos definir dos tipos de energía:
Es la energía del Universo,
presente en todos los lugares y accesible a todos los seres de la creación.
Esta energía forma un manto infinito del que todos los seres se nutren y
alimentan. En su forma más pura es luz, energía cristalina, pero puede modificar
su vibración y convertirse en energía densa o negativa. Recordemos que las dos
caras de la moneda forman la moneda. Los dos opuestos forman un todo. Aunque en
general, cuando hablamos de Energía Universal nos referimos a la energía de
alta vibración presente en el Universo y de la que todos nos nutrimos al
respirar.
ENERGIA VITAL
ENERGIA VITAL
Es nuestra propia energía
interna. Al absorber la Energía Universal con la respiración o la comida, se
produce un proceso de transformación energética por la cual adaptamos la
energía que captamos a nuestra propia energía interna. Cada uno de nosotros vibra
a un nivel energético distinto y nuestra energía interna tiene que estar en
consonancia con dicho nivel. Nuestros chakras al captar la energía ejercen
esa función de transformación.
Nuestra energía interna fluye a través de nuestro sistema energético por unos canales llamados Meridianos. Esta energía se conoce desde la antigüedad en diferentes culturas. Por ejemplo, en la China la llaman Chi, en Japón Ki, en la India Prana, etc. Existen dos fuerzas o polaridades universales de cuya interacción surge todo lo creado y las cuales deben estar en equilibrio: el yin y el yang. El Chi o Ki contiene ambas energías, el yan(energía masculina) y el yin (energía femenina). Del equilibrio entre ambas surge la armonía universal, física y mental.
Nuestra energía interna fluye a través de nuestro sistema energético por unos canales llamados Meridianos. Esta energía se conoce desde la antigüedad en diferentes culturas. Por ejemplo, en la China la llaman Chi, en Japón Ki, en la India Prana, etc. Existen dos fuerzas o polaridades universales de cuya interacción surge todo lo creado y las cuales deben estar en equilibrio: el yin y el yang. El Chi o Ki contiene ambas energías, el yan(energía masculina) y el yin (energía femenina). Del equilibrio entre ambas surge la armonía universal, física y mental.