Los humanos somos como un tren, cada uno sigue
diferente rutas sin embargo todos nos dirigimos hacia un mismo destino.
!Pero eso si, cada uno va en diferente vías! Unos van más rápido que
otros, no importa el tiempo que nos lleves, lo importante es ir soltando por el
camino y despojándose, de condicionamientos, creencias y limitaciones,
vislumbrar ese lugar de quietud en nuestro interior y quedarse a vivir en
él.
Es importante aprender a desprendernos de lo viejo para abrirnos a lo nuevo, sin embargo la tendencia es aferrarnos “con uñas y dientes a lo familiar y conocido", actitud vital que termina conduciéndonos inevitablemente al sufrimiento. El sendero hacia la esencia, no pasa por perfeccionarnos o “mejorarnos” como mucha gente cree, sino en desprenderse y soltar.
Cristina.
Es importante aprender a desprendernos de lo viejo para abrirnos a lo nuevo, sin embargo la tendencia es aferrarnos “con uñas y dientes a lo familiar y conocido", actitud vital que termina conduciéndonos inevitablemente al sufrimiento. El sendero hacia la esencia, no pasa por perfeccionarnos o “mejorarnos” como mucha gente cree, sino en desprenderse y soltar.
Sobre todo ir soltando y observando, los patrones de conducta y todo aquello a lo que estamos
apegados. Hemos olvidado lo que somos en esencia, hemos perdido la conexión con
nuestra alma. Tenemos que permitir expandirnos irradiando energía, porque en
cada uno de nosotros hay un campo de energía de Amor incondicional, y cuando
permanecemos ahí, nos sentimos completos y somos uno con el Todo.
Sintámonos abiertos a explorar en nuestro interior para darnos cuenta que nuestra realidad o por lo menos lo que nosotros la llamamos así, nace quizás dentro de nosotros y puede que sea donde radica nuestro poder...
ResponderEliminarUn cálido abrazo
Todos nos dirigimos al mismo lugar, pero no todos tenemos esa certeza. Cuando empezamos a ir quitando peso de nuestra mochila y somos conscientes de ello, es cuando nuestro corazón empieza a expandirse y nuestro interior se aquieta. Un gran abrazo de luz
ResponderEliminarHola Cristina, paso a saludarte y espero que estés bien. He estado unas semanas ausente, pero todo se acaba y de nuevo comienzo a disfrutar de vuestras publicaciones.
ResponderEliminarUn abrazo.
El viaje lo podemos hacer de muchas maneras, normalmente a ratos contentos, a ratos perezosos, enojados, dispuestos, con la mente limpia y la conciencia lavada, cuanto menos peso llevemos mas ligero será el trayecto. Un abrazo
ResponderEliminarCristina, tus palabras me dan fuerza en estos momentos...Es difícil soltarnos de apegos y recuerdos, que permanecen en el tiempo y darles libertad, aunque sigamos amándolos...Mi amiga argentina se va poco a poco, me ha costado aceptarlo...La fé y la confianza en la Providencia me han ayudado...Ella ha sido un ángel de luz para todos y debe seguir su camino...Sea lo que Dios quiera.
ResponderEliminarMi gratitud y mi abrazo por tus buenos posts y tu cercanía entrañable.
M.Jesús
Es verdad que todos andamos hacia el mismo destino, pero cada uno con nuestros pasos y batallas que nos hacen ser más sabios y menos crueles.
ResponderEliminarBesos
Hola, Cristina
ResponderEliminarEs difícil dejar ir el dolor inesperado, aquel que no teníamos programado. Pero tienes razón, debemos trabajar desde adentro para dejar ir momentos dolorosos y todo aquello a los que nos apegamos tanto. Una muy buena entrada, gracias por tus palabras.
Abrazo
Muy cierto buena reflexión . Uno debe superar los miedos y vivir una vida plena y de luz. Te mando un beso
ResponderEliminarPreciosa y aleccionante entrada, Cristina.
ResponderEliminar😘 feliz domingo
Preciosa y aleccionante entrada, Cristina.
ResponderEliminar😘 feliz domingo
Muchas gracias. Besetes.
ResponderEliminarHas puesto un ejemplo el del tren que así es la vida un constante viajar en el que ese tren se para en las estaciones cuando sentimos miedo pero siempre vuelve a circular.
ResponderEliminarMuy bella tu reflexión.
Un beso.
Muy linda entrada y linda reflexión. Besitos.
ResponderEliminarMuy linda entrada y linda reflexión. Besitos.
ResponderEliminarHola Cristina,a veces cuesta trabajo entender que ese peso que nos impide avanzar en verdad es un lastre que lejos de valernos para algo no nos sirve para nada.Pero bueno todo es cuestión de querer ser y entender aquello que somos en realidad.
ResponderEliminarMuchos besos y muchas gracias por todas estas buena y productivas enseñanzas!!
Ella era valiente. Soñaba en vivir lo desconocido con intuición; aprendiendo y scuchando a la gente decir que hay una vida mejor en nuestro interior.
ResponderEliminarEl se apegaba a la tierra que lo vió nacer; conformándose en lo conocido sin voluntad de ir más allá donde ella soñaba vivir en pareja...
Poco a poco pasaban los días y los años con caminos que separa la madurez y ella lloraba por el. Sufría cuando no la escuchaba aferrandose a su alma por hacerle ver una nueva dimensión; una forma diferente de ver las cosas para huir de la rutina, un mundo interior que con voluntad, los llevaría lejos...Pero el se negó pues su felicidad consistía en su vida diaria, en los problemas cotidianos o los que la vida lo conducía sin más. Le dijo de la sencillez de todo lo que lo rodeaba hasta lo más simple para vivir sin complicarse la vida y ella, lloró.
Le dijo adiós a la rutina y se adentró en el mar para cruzar el horizonte. Con ansias de conocer conoció a mas gentes de toda condición, culturas y formas de vivir de lo más variopintas y, también conoció el lado oscuro de la vida...forjó su corazón con valentía pero el camino se hacía largo y más largo lleno de soledades que hieren el alma...Quiso avanzar y avanzar en las enseñanzas de la vida hasta que se quedó sin fuerzas para seguir y, pasados unos años, decidió volver con el amor que dejó.
Con el pelo cano un día apareció por el pueblo. La gente comentaba sobre una extrangera venida de ultramar mas nadie la conocía. Lllevaba una vestimenta extraña y el acento de su voz no se distiguía de ninguna parte, La cabeza plateada de canas, las arrugas de toda una vida y la mirada profunda de desventuras. Auqel sitio ya no era de ella ¿y el? ¿dónde estaba el? ¿ dónde hallarlo para volver a sentir la pureza de la sencillez?.
Sentada en el parque donde se basaban, justo en aquel banco, una mano se posó en su hombro. Era cálida y trabajado por los años con una voz que jamás perdió su frescura ni su sencillez...Con manos sensibles al tacto grabo en su memoria cada vena de su mano y la besó mojándola en lágrimas. El le pregunto sobre su viaje, si había llegado lejos. Una paz recorrió su corazón de mujer con hacía años no sentía. Lo abrazó y lo besó. Con un hilo de voz le dijo: Por qué me dejaste ir si la felicidad siempre has sido tú y el con voz calmada, dijo nunca la quiso obligar pues en la sencillez de las cosas, está la libertad...
La vida esta llena de viajes, más o menos cómodos o más o menos dificultosos, pero lo importante siempre es llegar al punto de destino propuesto. Y así un viaje trás otro... Siempre con buen "equipaje", para los imprevistos, y con optimismo, pues se trata de eso, de un "viaje". En los viajes es también importante llevar una buena compañia, agradable, colaboradora...
ResponderEliminarY poder compartirlo con amigas como tú.
Un abrazo Cristina
Sí, yo ya me di cuenta que el infierno y el paraíso estan dentro de uno mismo.
ResponderEliminarEs nuestra elección vivir con espiritualidad y amor.
Mis cariños para ti, muy lindo post.
mar
La vida es un viaje constante. Vas dejando atrás recuerdos y tratando de alcanzar un destino feliz.
ResponderEliminarMuy bello lo que expresas.
Un fuerte abrazo. Feliz comienzo de semana.
Precioso y muy cierto Cristina, pero en este viaje cuanto pesa el lastre que llevamos y cuan difícil es dejarlo. Un beso enorme y te deseo una buena semana,
ResponderEliminarhay mucha riqueza en tus pensamientos alados
ResponderEliminarBien cierto amiga, ahí estamos aprendiendo en la vida, haciendo el camino del destino tomando en ocasiones rumbos diferentes, pero siempre de la mano del amor, la ilusión y la esperanza.
ResponderEliminarBesos de luz, pasa una linda semana.
Es como echar la caña para pescar, intentas sacar algo cada vez y vas deshaciendote de lo que no necesitas devolviendolo a su sitio. Está claro que todos vamos al mismo sitio aunque por caminos diferentes.
ResponderEliminarMe gustó este consejo.
Besotessssssssss cuidate
La verdad es que deberíamos darnos cuenta de lo que dices. Quizas así tendríamos ese respeto perdido..
ResponderEliminarBesos
La verdad es que deberíamos darnos cuenta de lo que dices. Quizas así tendríamos ese respeto perdido..
ResponderEliminarBesos
Que bello Cristina
ResponderEliminarEres un hermoso oasis para los caminantes sedientos
Sabes sembrar y me encanta llegar hasta aca y leerte
Compariendo tus sentires deseo tengas una buena semana
Cariños
Fluir, soltar, dejar ir....y que el Universo haga su trabajo justo cuando deba hacerlo...
ResponderEliminarEso es paz
Isaac
Fluir, soltar, dejar ir....y que el Universo haga su trabajo justo cuando deba hacerlo...
ResponderEliminarEso es paz
Isaac
A veces es difícil soltar lastre, pero, tenemos que intentarlo si buscamos la felicidad.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Un fuerte abrazo.
La vida es un viaje muy rápido, así que hay que ponerle toda la intensidad y pasión a cada uno de nuestros actos.
ResponderEliminarUn abrazo grande.
Ya es bastante difícil la vida como para agárranos a las cosas difíciles y negativas. Seamos sencillos y dejemos las cosas que de nada no sirven, vivamos como las plantas… en armonía. Un beso Cristina.
ResponderEliminarMuy bella la fotografía de las flores .. ahí me quedo..
ResponderEliminarSaludos para ti Cristina !
Voy a mirar más bajo la falda de este blog.
ResponderEliminarhoy te leo y me siento que estoy aligerando en pequeños pasos lo que quiero lograr Un abrazo con luz
ResponderEliminarEl viaje de la vida puede ser muy pesado o muy ligero;depende de nuestra disposición interior.Si somos sencillos nos vamos quitando peso, y sin agobios ni complicaciones se avanza mejor, y se puede disfrutar mejor del paisaje.
ResponderEliminarHola de visita por tu blog, gracias por la visita. Ya creo que vuelvo a la rutina un saludo y besos
ResponderEliminarSoltando y observando...
ResponderEliminarBesos
Yo soy de las que se aferra y eso como tu bien dices no es bueno. Buen findeee. Un abrazooo.
ResponderEliminarProfundas letras, Cristina gracias por su visita Saludos
ResponderEliminarSon palabras que penetran en alma y corazón...hoy precisamente que siento honda pena en mi alma ...mi hijo mayor cumple años sin su padre ...yo hoy me sentí tan sola como una pavesa entre una ventolera ...
ResponderEliminargracias no pude venir antes por comer hoy en familia ...besos amiga eres calma y compañía
Marina
Interesante entrada Cristina, es verdad que conviene ir despojándonos de todo lo pesado para que el camino sea más liviano y tranquilo.
ResponderEliminarUn beso.
despojarse de lo que no sirve para crecer como seres de luz, es un largo trabajo interior
ResponderEliminaruna lucha permanente, pues es más fácil llevar por situación mediáticas o vivencias que muchas veces solo nos alegran el momento pero no dejan una huella profunda en especial con nuestro ser espiritual.
Uma bela e feliz semana. Palavras que fazem a alma voar...
ResponderEliminarLeerte da paz al espíritu.
ResponderEliminarLeerte da paz al espíritu.
ResponderEliminarHola Cristina,
ResponderEliminarCertero y espiritual artículo, que desde lo cotidiano de nuestras vidas y el camino a emprender nos enseña que lo mejor es desprenderse y soltar aquellas viejas creencias que no aportan nada, los prejuicios, el odio, el resentimiento, etc. Por contra, no se trata de buscar la mejoría y el perfeccionamiento. Entiendo que podemos caer en el perfeccionismo.
Me ha encantado, es desde la sencillez del día a día, comprendiendo las reacciones de los demás, y el interior de nuestras percepciones, como mejor se aprende a ser y aceptar.
Un placer leerte.
Besos de luz
Una hermosa que habla por si misma.
ResponderEliminarGracias.
Qué hermoso lo que dices, Cristina, y cómo lo dices... Y sí, cada uno llega de distinta manera a su destino. Vamos en el tren de la vida y a todos nos espera la luz... Lo he disfrutado. Gracias. Besos.
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